Cuando llegue casa,despues del instituto,la comida ya estaba preparada y la mesa puesta,y mi madre y mi hermana estaban en ella,y comiendo.
-¡Hola!-salude,con aire alegre.
-¡Hola!-me saludaron tambien al unisono.
-¿Que tal te ha ido hoy?-me pregunto mi madre.
-¡Muy bien!lo de siempre-le respondi.
Me fui al servicio a lavarme las manos y lacara,para despues poder sentarme a comer.
-¿Y mi plato?-pregunte.
-Vas y te lo traes tu-me dijo Sara,mi hermana.
-De acuerdo...entonces tu te lavas tus cosas-le dije,sabiendo que me haria caso.
Se quejo,se levanto de la mesa y me trajo un plato y cubiertos.
-¡Hah!y ya que estas parada trae las servilletas-le dije.Se volvio para traerlas.
-¡Eso no es justo!-se volvio a quejar.
-Pues es lo mismo que haces tu con migo-le dije.
-A que no ¿mama?-acuio a ella,que seguia comiendo sin hacer caso a nuestros comentarios.
-¡Basta chicas!¿Puede comer uno tranquilo?-nos riñio,y no tuvimos mas remedio que callarnos y seguir comiendo.
Sara,era una niña de 11 años,de pelo bien largo y castaño oscuro,con piel morenita de quedarse dormida afuera los dias de mucho sol y calor,de ojos grandes y oscuros.De caracter testarudo y caprichoso.Era demasiado seria y aplicada para una niña de su edad,pero le gustaba jugar con barbies,como a todas las niñas,y yo siempre la hacia reir.
No era que estuvieramos todo el dia discutiendo,ni tampoco riendo.Digamos que cada una iba a su bola,y cuando nos haciamos falta siemrpe estabamos dispuestas a ayudarnos.
Cuando terminamos de comer,mi madre se fue a hechar una siesta,como siempre,mientras Sara y yo recigiamos y limpiabamos la cocina.En esta casa nos repartiamos las tareas.
Cuando termine,le dedique toda la tarde a mi perro,cuyo nombre rspondia a Golfo.
Me lo regalaron cuando era un poco mas pequeña.
Era un perro enorme...mezcla de tres razas;pastor alemán,rottweiler y mastín.
Lo que mas me gustaba de su mezcla de colores de pelage;untanto pelirrojo,casi marron,negro...era que en la cola,sobre el fondo peirrojo,habia un dibujo,el cual lo interpretaba como una cruz,y la linea vertical acavaba como i fuera una flecha.Y en la cabeza,de color negro,se podia identificar,tambien,el dibujo de un ave,como de un agila.
Yo desde pequeña crei que era un lobo,y a ese pensamiento me lo guarde para mi.Desde entonces,aveces,le digo lobito,y le hablo...porque en el fondo,de que los animales tienen la capacidad de entendernos,aunqeu sean con entonaciones de voz,o conn el pensamiento,nuestra energia y nuestra aura,al igual que nosotros a ellos.
Esa tarde lo saque a dar una vuelta por el bosque,y sucedio algo muy extraño.
Estabamos en un claro pequeño,lleno de flores de muchos colores.
Le solte para que correteara y jugaramos con los palitos que nos encontrabamos por el suelo.Me acorde que tenia una pelota de goma de un color amarillento.Se la tire unas cuantas veces.A la cuarta vez que fue a recogerla,se la habia tirado muy fuerte,y tuvo que internarse en el bosque.Como tardaba bastante de lo normal,decidi ir a buscarle,preocupada,asi que tambien me interne entre los arboles,pero manteniendo a la vista el claro mientras lo llamaba.
Estaba un poco oscuro,porque aquel dia,como muchos otros,no habia sol.
Me parecio ver un rabo detras de el tronco de un arbol.Estaba lejos,pero la identifique por el dibujo que habia en ella.Lo llame,esta vez con mas animo,y si.Era Golfo,quien vino corriendo con la pelota en la boca.Cuando estuvo a mi lado,dejo la pelota en el suelo y me dio la pata.Se la agarre con una mano y le dije:
-¿Que estabas haciendo?me tenias preocupada-.
Acerco su hocico hacia mi cara y me lamio,una,dos,tres veces...
-¿Pero que te pasa?-pregunte mientras reia y le apartaba para que dejara de llenarme la cara de babas.
Me ladro cariñosamente.
No supe que intentaba transmitirme,pero lo interprete como un "te quiero".
-¡Yo tambien te quiero,Golfillo!-le acaricie juguetonamente la cabeza y le di un besito en el hocico.
Recogi la pelota del suelo y se la volvi a lanzar en direccion al claro,quien corrio para ir a buscarla.
Disfrutaba viendole brincar como un antilope,aunque no saltara tan alto,pero se le parecia.
Cuando iba caminando hacia el claro,escuche el partirse de una rama seca.
Me volvi bruscamente.
No vi nada ni a nadie,pero podia sentir una mirada clavada en mi.Iba a internarme otra vez,intrigada,cuando escuche varios ladridos que no paraban de llamarme que hicieron que corriera hacia ellos.
Cuando logre agarrar la pelota de entre los colmillos de Golfo,se la tire tan lejos y fuerte,que inconscientemente la mande a parar al rio que pasaba por el claro.
Cuando pude darme cuenta,ya era demasiado tarde.Corri junto a Golfo haciala orilla,pero ni el ni yo nos tiramos a recogerla.Desgraciadamente,el rio era muy profundo y corrian aguas rapidas,frias y turbias.Mientras,la pelota flotaba rio a bajo.
-¡Bueno!...tendremos que conseguir otra pelota-le dije acariciandole el lomo,apenada.
Le ate la correa al collar u nos dirigimos a casa,un tanto tristes por la reiente perdida pero...¿que se le iba a hacer?...estas cosas pasan muy a menudo.
Cuando llegamos,mientras ataba a Golfo a la cadena de su casita de perro,vi como un chico de mi hedad no paraba de observarme.
Era rubio,alto y de piel bastante blanca.
Pude ver que en una de sus manos sostenia una pelota de un color llamativo,conla cual jugueteaba.En seguida recorde la pelota que Golfo y yo acabavamos de perder.
Acto seguido,el joven se interno en el bosque.Golfo,mirando en su direccion,empezo a gruñirle.
-¿Crees que sea nuestra?-le pregunte.Me ladro una vez para despues seguir gruñendo.
Sali corriendo por la puerta trasera del jardin dirigiendome hacia el chico que se alejaba poco a poco.
-¡Eh,tu...espera!-le grite,pero no se volvio.Corri,esta vez mas rapido,para poder alcanzarle.
Cuando me interne en la oscuridad y la humedad de los arboles,no habia ni rastro de aquel chico.
Obsereve atenta por si llegaba a verlo,pero no le vi.
-Creo que esto es tuyo-me sobresalto una voz masculina.Me di la vuelta rapidamente.Era el chico rubio de antes.observe como me ofrecia la pelota.
-¡Gracias!-le dije mientras la aceptaba.Tuve un ligero contacto con su piel que hizo que me diera un escalofrio.
-No hay de que-contesto.Lo mire a los ojos,los cuales eran de un azul claro y profundos.Lo observe detenidamente.<>pense.
-¿Nos hemos visto en alguna parte?-le pregunte,intentando recordar.
-Quizas de vista-me respondio.Al ver que seguia con la misma expresion de duda,se me presento.
-Me llamo Lucas-dijo.Aquellas palabras eran mas que suficientes.Me paralice,sin poder decirle nada.
-¿Y tu?-me pregunto,obligandome a reaccionar.
-Yo...m...me llamo Leticia,p...pero todos me llaman Leti-tartamudeé.
-Pues,encantado de conocerte-me quede eclipsada con la sorisa que me dirigio.Me quede,otra vez,paralizada.No sabia muy bien el porque,pero estaba segura de,o porque era un chico guapisimo,quizas el mas guapo qu haya visto nunca,o era por el hecho de que sellamara Lucas.Volvio a desperarme de mi paralisis.
-Lo siento,pero tengo que irme-me dijo,con la mirada fija en los arboles.
-Ah...¿si?-volvi a tartamudear.
-Sí,pero no te preocupes,nos volveremos a ver-me susurro al oido para despues darme un beso en la mejilla,la cual se sonrojo.Quise darme la vuelta,pero por alguna razon me paralizaba a cada dos por tres frente a aquel chico.Cuando pude reaccionar,ya no habia ni rastro de Lucas.Me quede observando el lugar por el cual habia desaparecido,con la palma de mi mano en contacto con la mejilla que acavaba de recibir un beso,frio pero fugaz.
cuando regrese a casa,lo primero que hice fue llamar a Dominik para contarle lo que acavaba de suceder,y mas que nada para asegurarme de los hechos y preguntas que rondaban por mi cabeza.
................................CONTINUARÁ......................................
-¡Hola!-salude,con aire alegre.
-¡Hola!-me saludaron tambien al unisono.
-¿Que tal te ha ido hoy?-me pregunto mi madre.
-¡Muy bien!lo de siempre-le respondi.
Me fui al servicio a lavarme las manos y lacara,para despues poder sentarme a comer.
-¿Y mi plato?-pregunte.
-Vas y te lo traes tu-me dijo Sara,mi hermana.
-De acuerdo...entonces tu te lavas tus cosas-le dije,sabiendo que me haria caso.
Se quejo,se levanto de la mesa y me trajo un plato y cubiertos.
-¡Hah!y ya que estas parada trae las servilletas-le dije.Se volvio para traerlas.
-¡Eso no es justo!-se volvio a quejar.
-Pues es lo mismo que haces tu con migo-le dije.
-A que no ¿mama?-acuio a ella,que seguia comiendo sin hacer caso a nuestros comentarios.
-¡Basta chicas!¿Puede comer uno tranquilo?-nos riñio,y no tuvimos mas remedio que callarnos y seguir comiendo.
Sara,era una niña de 11 años,de pelo bien largo y castaño oscuro,con piel morenita de quedarse dormida afuera los dias de mucho sol y calor,de ojos grandes y oscuros.De caracter testarudo y caprichoso.Era demasiado seria y aplicada para una niña de su edad,pero le gustaba jugar con barbies,como a todas las niñas,y yo siempre la hacia reir.
No era que estuvieramos todo el dia discutiendo,ni tampoco riendo.Digamos que cada una iba a su bola,y cuando nos haciamos falta siemrpe estabamos dispuestas a ayudarnos.
Cuando terminamos de comer,mi madre se fue a hechar una siesta,como siempre,mientras Sara y yo recigiamos y limpiabamos la cocina.En esta casa nos repartiamos las tareas.
Cuando termine,le dedique toda la tarde a mi perro,cuyo nombre rspondia a Golfo.
Me lo regalaron cuando era un poco mas pequeña.
Era un perro enorme...mezcla de tres razas;pastor alemán,rottweiler y mastín.
Lo que mas me gustaba de su mezcla de colores de pelage;untanto pelirrojo,casi marron,negro...era que en la cola,sobre el fondo peirrojo,habia un dibujo,el cual lo interpretaba como una cruz,y la linea vertical acavaba como i fuera una flecha.Y en la cabeza,de color negro,se podia identificar,tambien,el dibujo de un ave,como de un agila.
Yo desde pequeña crei que era un lobo,y a ese pensamiento me lo guarde para mi.Desde entonces,aveces,le digo lobito,y le hablo...porque en el fondo,de que los animales tienen la capacidad de entendernos,aunqeu sean con entonaciones de voz,o conn el pensamiento,nuestra energia y nuestra aura,al igual que nosotros a ellos.
Esa tarde lo saque a dar una vuelta por el bosque,y sucedio algo muy extraño.
Estabamos en un claro pequeño,lleno de flores de muchos colores.
Le solte para que correteara y jugaramos con los palitos que nos encontrabamos por el suelo.Me acorde que tenia una pelota de goma de un color amarillento.Se la tire unas cuantas veces.A la cuarta vez que fue a recogerla,se la habia tirado muy fuerte,y tuvo que internarse en el bosque.Como tardaba bastante de lo normal,decidi ir a buscarle,preocupada,asi que tambien me interne entre los arboles,pero manteniendo a la vista el claro mientras lo llamaba.
Estaba un poco oscuro,porque aquel dia,como muchos otros,no habia sol.
Me parecio ver un rabo detras de el tronco de un arbol.Estaba lejos,pero la identifique por el dibujo que habia en ella.Lo llame,esta vez con mas animo,y si.Era Golfo,quien vino corriendo con la pelota en la boca.Cuando estuvo a mi lado,dejo la pelota en el suelo y me dio la pata.Se la agarre con una mano y le dije:
-¿Que estabas haciendo?me tenias preocupada-.
Acerco su hocico hacia mi cara y me lamio,una,dos,tres veces...
-¿Pero que te pasa?-pregunte mientras reia y le apartaba para que dejara de llenarme la cara de babas.
Me ladro cariñosamente.
No supe que intentaba transmitirme,pero lo interprete como un "te quiero".
-¡Yo tambien te quiero,Golfillo!-le acaricie juguetonamente la cabeza y le di un besito en el hocico.
Recogi la pelota del suelo y se la volvi a lanzar en direccion al claro,quien corrio para ir a buscarla.
Disfrutaba viendole brincar como un antilope,aunque no saltara tan alto,pero se le parecia.
Cuando iba caminando hacia el claro,escuche el partirse de una rama seca.
Me volvi bruscamente.
No vi nada ni a nadie,pero podia sentir una mirada clavada en mi.Iba a internarme otra vez,intrigada,cuando escuche varios ladridos que no paraban de llamarme que hicieron que corriera hacia ellos.
Cuando logre agarrar la pelota de entre los colmillos de Golfo,se la tire tan lejos y fuerte,que inconscientemente la mande a parar al rio que pasaba por el claro.
Cuando pude darme cuenta,ya era demasiado tarde.Corri junto a Golfo haciala orilla,pero ni el ni yo nos tiramos a recogerla.Desgraciadamente,el rio era muy profundo y corrian aguas rapidas,frias y turbias.Mientras,la pelota flotaba rio a bajo.
-¡Bueno!...tendremos que conseguir otra pelota-le dije acariciandole el lomo,apenada.
Le ate la correa al collar u nos dirigimos a casa,un tanto tristes por la reiente perdida pero...¿que se le iba a hacer?...estas cosas pasan muy a menudo.
Cuando llegamos,mientras ataba a Golfo a la cadena de su casita de perro,vi como un chico de mi hedad no paraba de observarme.
Era rubio,alto y de piel bastante blanca.
Pude ver que en una de sus manos sostenia una pelota de un color llamativo,conla cual jugueteaba.En seguida recorde la pelota que Golfo y yo acabavamos de perder.
Acto seguido,el joven se interno en el bosque.Golfo,mirando en su direccion,empezo a gruñirle.
-¿Crees que sea nuestra?-le pregunte.Me ladro una vez para despues seguir gruñendo.
Sali corriendo por la puerta trasera del jardin dirigiendome hacia el chico que se alejaba poco a poco.
-¡Eh,tu...espera!-le grite,pero no se volvio.Corri,esta vez mas rapido,para poder alcanzarle.
Cuando me interne en la oscuridad y la humedad de los arboles,no habia ni rastro de aquel chico.
Obsereve atenta por si llegaba a verlo,pero no le vi.
-Creo que esto es tuyo-me sobresalto una voz masculina.Me di la vuelta rapidamente.Era el chico rubio de antes.observe como me ofrecia la pelota.
-¡Gracias!-le dije mientras la aceptaba.Tuve un ligero contacto con su piel que hizo que me diera un escalofrio.
-No hay de que-contesto.Lo mire a los ojos,los cuales eran de un azul claro y profundos.Lo observe detenidamente.<
-¿Nos hemos visto en alguna parte?-le pregunte,intentando recordar.
-Quizas de vista-me respondio.Al ver que seguia con la misma expresion de duda,se me presento.
-Me llamo Lucas-dijo.Aquellas palabras eran mas que suficientes.Me paralice,sin poder decirle nada.
-¿Y tu?-me pregunto,obligandome a reaccionar.
-Yo...m...me llamo Leticia,p...pero todos me llaman Leti-tartamudeé.
-Pues,encantado de conocerte-me quede eclipsada con la sorisa que me dirigio.Me quede,otra vez,paralizada.No sabia muy bien el porque,pero estaba segura de,o porque era un chico guapisimo,quizas el mas guapo qu haya visto nunca,o era por el hecho de que sellamara Lucas.Volvio a desperarme de mi paralisis.
-Lo siento,pero tengo que irme-me dijo,con la mirada fija en los arboles.
-Ah...¿si?-volvi a tartamudear.
-Sí,pero no te preocupes,nos volveremos a ver-me susurro al oido para despues darme un beso en la mejilla,la cual se sonrojo.Quise darme la vuelta,pero por alguna razon me paralizaba a cada dos por tres frente a aquel chico.Cuando pude reaccionar,ya no habia ni rastro de Lucas.Me quede observando el lugar por el cual habia desaparecido,con la palma de mi mano en contacto con la mejilla que acavaba de recibir un beso,frio pero fugaz.
cuando regrese a casa,lo primero que hice fue llamar a Dominik para contarle lo que acavaba de suceder,y mas que nada para asegurarme de los hechos y preguntas que rondaban por mi cabeza.
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